¿En serio tengo un propósito?
Ya hemos hablado un poco de esto, y aun así, se que no es fácil convencernos de que estamos en este mundo con un propósito, para cumplir una misión, para dejar una marca, o… para hacer algo.
Y es que pasan los años, la niñez y la adolescencia se quedan atrás y pronto la juventud también irá pasando, y la pregunta “Qué estoy haciendo aquí” seguirá rondando en nuestra cabeza.
¿Pero sabes qué? Dios sí te puso en este mundo loco con un propósito que encaja con su plan perfecto y además con la capacidad de plantearte tus propias metas, proponerte cosas grandes, usar tus habilidades y conseguirlas.
Aprovecha tu tiempo
“Tengan cuidado de cómo se comportan. Vivan como gente que piensa lo que hace, y no como tontos. Aprovechen cada oportunidad que tengan de hacer el bien, porque estamos viviendo tiempos muy malos.”
Efesios 5:15-16 TLA
“El tiempo perdido, los santos lo lloran”, “El tiempo es oro”, “No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”... y muchos otros dichos que hablan de lo mismo: Si no aprovechas el tiempo, el tiempo te deja.
¿Quieres conseguir tus metas? trabaja en ellas, planifica y no te rindas cuando las cosas salgan mal, porque aunque no nos guste, eso suele pasar, y muy seguido. La buena noticia es que cada victoria te acerca más a tu meta.
“Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios, sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos.”
Efesios 5:15-16 NVI
Reconoce tus habilidades
Todos tenemos habilidades y talentos. ¿Cantas? ¿Tocas un instrumento? ¿Eres bueno con los números? ¿Eres bueno hablando? ¿Dibujas?… Tú sabes qué talento tienes, y si no lo has descubierto, pronto lo harás. Puedes usar lo que tienes para caminar hacia tus metas.
Ya se que da miedo, y probablemente siempre siempre de miedo, pero bueno, eso es parte de la emoción de la vida. Confía en ti y confía en Dios, entrégale tus metas, tus capacidades y si aún las conoces, pídele que te ayude a encontrarlas.
Trabajo en equipo
“Mejor son dos que uno, porque obtienen más fruto de su esfuerzo. Si caen, el uno levanta al otro. ¡Ay del que cae y no tiene quien lo levante!… …Uno solo puede ser vencido, pero dos pueden resistir. ¡La cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente!”
Eclesiastés 4:9-10, 12 NVI
Tal vez tu meta se grande y difícil para una persona, que eso no te asuste, solo significa que necesitarás ayuda.
Ya te he hablado de lo importante que es tener buenos amigos y apoyate en ellos (ve los post anteriores si no sabes de qué te hablo, cómo este “Más que un like”). Hazte de un equipo, ayudalos en sus metas y ellos te ayudarán en las tuyas.
“Quien con sabios anda a pensar aprende; quien con tontos se junta acaba en la ruina.”
Proverbios 13:20 TLA
Aprovecha tu juventud
No quiero asustarte, pero, no siempre serás joven. Aprovecha ahora que tienes tiempo, libertad, fuerza y muchas ideas; diviértete, haz planes intenta cosas, descubre para qué eres bueno. Tal vez te equivoques, pero no tengas miedo, eso es parte de la vida. Escucha consejos aprende de las experiencias de otros, rodéate de gente que te ayude a ser mejor y sobre todo, confía en Dios y Él hará lo mejor para tí.
“Deja en manos de Dios todo lo que haces, y tus proyectos se harán realidad.”
Proverbios 16:3 TLA
Nos vemos a la próxima, comenta si te han servido nuestros post y compártelo con otros para que reciban un poco de ánimo y palabra de Dios.
Te felicito, sigue adelante, Ing. Un abrazo. Gracias por tu vida.